Cólico en el corazón


Todas las mañanas Rocío se tenía que recomponer alrededor de aquel corazón vacío con el que se había acostumbrado a dormir. Desde pequeña sus padres compensaban el hueco de su víscera vacía llenándole los bolsillos de dinero. A los 27 años ya tenía un puesto de directiva en la empresa familiar.
Cada amanecer iba caminando al trabajo. Salía de casa, cruzaba la esquina con el sol asomándose detrás de los edificios y a lo lejos ya escuchaba la música del saxofonista y su corazón comenzaba a latir. Días tras día era la manera en que las notas musicales bombeaban de sangre el corazón de Rocío. Cuando se cruzaban se sonreían sin palabras y con sus ojos se saludaban.
El saxofonista tenía la elegancia del pobre que sabe cuál es su sitio en la calle. Siempre llevaba un traje marrón, cada vez más gastado; y en verano se quitaba la camisa dejando su torso medio desnudo escondiendo una parte con la chaqueta que nunca se quitaba. Por cuna tuvo una caja vacía de cervezas y por manta un saco de patatas. Sus padres le llamaron Mario. A pesar de haber nacido sordo aprendió el oficio de su abuelo: tocar el saxofón a cambio de unas monedas. Nunca aprendió a hablar y por su saxo parecía expresar todo lo que no podía decir con su boca.
De aquellas palabras mudas convertidas en música salía la vida que reanimaba cada mañana a Rocío. Él la veía pasear con un novio de su alcurnia que acabó siendo su marido. Cuando Roció se mudó de barrio ni el amor de su marido ni el de sus hijos podían evitar que su corazón se marchitara.
Después de tantos años todavía se puede ver a Rocío paseando por su antiguo barrio cada tres o cuatro días para llenar su corazón de sangre y sonreír sin palabras a Mario.

cólico: dolor intenso en víscera vacía

43 comentarios:

ana. dijo...

Sólo, vos y nadie más que vos, Soportándome o como te llames (lo mismo da)podés imaginar una historia en la que un corazón vacío y sin vida pueda latir al compás del sonido de un saxo. Tu relato es precioso. Estoy felíz por haberte encontrado. Me hacés volar y eso, es lo más lindo del mundo. Besos.

Anónimo dijo...

El hueco en el corazón debió de ser profundo y me imagino la música del saxofinista subiendo como el mar con la marea, llenando el pozo, y después vaciándose.
Algo así he sentido al pasar junto a los músicos de la calle.
Me gustan tus relatos. Siempre conmueven.
Besos

Javier dijo...

Me encantó la historia. Es muy emotiva. Te felicito nuevamente, un lujo haber encontrado este blog.

Saludos.

Efter dijo...

De nuevo un muy buen relato, Soport.
La pobre sustituyó el instrumento de percusión del corazón por el instrumento de viento del saxo.

Borrasca dijo...

Soport que bello relato, me llenará el fin de semana, deseo uno excelente para ti.

Besos borrascosos

Los viajes que no hice dijo...

Es precioso, sí. A mí me pasó casi lo mismo, aunque yo tenía un corazón latiente, en mi primer día en Sevilla...

Doctor Krapp dijo...

Algo ha pasado, de unos años a esta parte cuando cada vez proliferan más los humanos que no llevan esa víscera y funcionan tan alegremente. No hay guardia de tráfico que les pare y les multe por no llevar un corazón de seguridad. Incluso pueden votar en las elecciones y presentarse a las mismas con el único requisito de llevar el DNI y no un corazón debidamente homologado con sus aurículas, sus ventrículos y sus no menos hermosas arterias.
Algo ha pasado y promete seguir pasando.

Coro dijo...

Sopor:

Es una alegría venir a tu blog. Me llevo una sonrisa y reflexiones...

Besos

Juan Duque Oliva dijo...

Ay que pena que los auténtico amores se tengan que ahogar en un mar de arenas movedizas, que pena más grande, que penaaaaa.

El Buscador de Miradas dijo...

Bellísimo relato, de los que dejan un poso en el corazón que perdura en el tiempo.

Te felicito.

Novicia Dalila dijo...

Hay ritmos que hacen latir, y si en una fantasía es posible que un saxo consiga hacer sentir a alguien que no ha sido capaz de encontrar en tu casa, en su infancia, en tu entorno el amor que todos necesitamos y que nos hace humanos, me parece genial, la verdad.
Estupendo relato tornillitos. Me ha gustado mucho.
Un beso

Señor colostomizado dijo...

Qué peste debía de oler el traje de Mario ¿no?.

Winnie dijo...

Hermosisimo. Bello. Cautivador. Gracias por este relato...yo he oído hasta el saxo, y hasta esas palabras que no se decían. Besos y gracias. Nos leemos.

Unknown dijo...

El poder de la música...
Mi mas sincera enhorabuena. Un relato colosal.

@ELBLOGDERIPLEY dijo...

Qué bonita historia la de Mario y Rocío. Y qué curioso el saxofonista que fuera sordo, una sin corazón, el otro sin oído, estamos buenos:-). Pero vibraban los dos.
Abrazos.

cristal00k dijo...

¿Un músico sordo de nacimiento? y con un amor platónico de alcurnia... ¡Ya ves!
Será vd. un "desdoblao" pero hay que reconocerle que hace una historia de cualquier cosa y monta personajes en un plis.
Me debo estar contagiando de la Doña, porque me corroe la envidia (sana) Enfín... nos vemos en la Gala.

ybris dijo...

Pobre Rocío de corazón hueco y bolsillo lleno.
Dichosa Rocío que lo rellena con sangre-música de un corazón sordomudo.
Nada está perdido.
Ni siquiera en medio del cólico crónico de un sentimiento vacío.

Muy bueno, amigo.

Un abrazo

Pantagruel dijo...

No me gustan los finales inconcretos. Por qué no casas a la pija con el músico callejero? Marsé lo hizo en El amante bilingüe".

Rocío dijo...

¡Qué preciosidad!
Así se llenan los corazones, así los llenas tú.

Gracias por hacerme disfrutar.
Un beso

Insumisa dijo...

Me gustó.
Aunque la realidad golpee la nariz (como dice el señor de la bolsa conectada a su intestino).
No hay nada para la mugre exterior, que un buen baño y lavandería no curen.
¿Qué sería del amor sin el amor de ensueño?

Besos

Lilyth dijo...

Es que por mucho que insistamos en conseguir el éxito que la sociedad nos demanda, el corazón que no sabe de convencionalismos es feliz con aquellas pequeñas cosas (como dice Serrat) me quedo nostálgica y buscando un poco de blues para acompañar la tarde del domingo... ;)

lisebe dijo...

El corazón no entiende razon, y la razón no entiende al corazón pero es en eso en lo que nos basamos a la hora de valorar nuestra existencia humana convencional.

Excelente Soport.... (es que no me sale eso de decirte el nombre entero) eres demasiado bueno.. que le vamos a hacer (ahora me diras que pelota) me es igual, es lo que pienso.. y si tienes dudas te vás a una ración de Dr. Freud.

Por cierto, nos vemos en la Gala de Maritoñi, no sé si me cambio de disfraz o voy con el de Catwoman, igual me lo cambio y me pongo el de conejita de Briget Jones, bueno alli nos vemos..

Besosss multiples

Fermín Gámez dijo...

Eso que has escrito de que la elegancia es de aquel que sabe su sitio es un puntazo y una gran verdad.
Y el texto, genial.

Landahlauts dijo...

A mi me has ganado en la primera frase. Esa idea de Rocío recomponiéndose alrededor de aquel corazón vacío... es genial. Me recordó una canción de Sabina que decía aquello de "era tan pobre que no tenía más que dinero...".

Rocío y Mario eran dos personas "incompletas", por motivos distintos. Pero, seguro que ver Rocío (en el caso de Mario) o escucharlo a él (en el caso de ella), los hacía sentir completos.

Me gustó, Soportándome. Tus tornillos están brillantes últimamente.

niñaca dijo...

Te sigo leyendo cielo. Me ha conmovido tu relato. Me ha dado mucho morbo lo del trozo de torso que se le ve cuando se quita la camisa en verano.Por favor ilustralo Qué primaverazo tengo encima.

Gara dijo...

Q historia mas bella,q imaginacion la tuya niña,sigue deleitandonos asi, q es un verdadero sueño leerte.

Besos

Lionella dijo...

que bueno, aunque rocío tendría que comer más, eso la animaría...
besos

Maritoñi dijo...

Que poquito tiempo queda para la entrega de los premios. Yo estoy nerviosísima ¿Y Tú?

Ego dijo...

A nosotros nos parece una bella historia, pero a sus protagonistas les ha de parecer una putada.
Lo mismito, lo mismito, ocurre con tu vida, con la mía y con la de aquel.
Un (b)eso y enhoragüena

Juan Duque Oliva dijo...

Me gustaría entrevistarlo en directo en el radioblog del 21 de Marzo de 13 a 17 horas, que habrá un especial de los premios Maritoñi, para los nominado damnificados.

Las entrevistas las haremos a traves del chat de voz de gmail quien lo tengo instalado y funcionando o a traves del teléfono fijo.

Nos gustaría contar contigo, ponte en contacto con nostros a traves del correo electrónico

juanduqueo@gmail.com

espero que te animes a participar

Besos

Bueno, al Dr ya le tendremos

lisebe dijo...

Mi querido Soport..

Tan solo paso para decirte que pases un momento por mi blog Lisebe a recoger dos premios.

Besitosssssssss

Unknown dijo...

claro, si en vez de un saxo tocara el tambor seguro que la cosa era diferente ;)

/ dijo...

Excelente relato, me encantó. Hay tantas vidas como las de RocíO Y Mario. . .

BESOS

Anónimo dijo...

Hola, querido Soportándome.

Parece que tu cuento ha gustado mucho. A mí también.

(En clave humorística, me recuerda aquella canción de Rubén Blades, en la que -final feliz- la rica niña Elena se fugaba con el trompetista de la vecindad...)

Ya en serio, lo que más me impacta es algo que encuentro en tus demás textos: la expresión de sentimientos e historias a partir de toda esa imaginería orgánica de huecos, vísceras, agujeros, amputaciones, prótesis, vacíos, rellenos, postizos... metáforas de la carne y el espíritu.

Besos
Jesús Ortega (sin loguear)

caotico_jq dijo...

Bonita metáfora la del corazón... me ha gustado.

Un beso

cristal dijo...

No cabe duda del poder de la música que hace bombear sangre por todo el cuerpo, a pesar de carecer de corazón, pero que importa si se tienen los bolsillos llenos. Bello y nostálgico relato, he disfrutado mucho leyéndolo. Un beso con corazón.

Maritoñi dijo...

Me siento tan identificada con la niña rica....

isobel dijo...

que ternura y que tristeza y que..., jo no me hagas pensar, me gusto el relato, mejor así, ¿no?

Anónimo dijo...

¿Será la música mejor complemento del vacío que todos sentimos que el amor?

Menuda pregunta

Anónimo dijo...

ais no se si es bonito o triste, es que... soy una romantica y quiero que Rocio acabe con Mario ju jajaa, mmm saxo... yo tenia un guitarrista como Mario que cada vez que me veia tocaba por Sabina.
Un beso

~¿si él=Sol, io=Andròmeda?~ dijo...

^-^ Wao! ke cosas de esta fucking vida. Todo imperfecto /incompleto. Carajo. ¡Gracias y felicitaciones por todo! ^-^

Anónimo dijo...

jo...qué llorera más grande...

yacasinosoynadie dijo...

ay dios mio... los misterios del corazón... nada más extraño que el corazón...